El 28 de junio de 1969, la policía allanó el Stonewall Inn, un bar gay ubicado en Nueva York. Las tensiones aumentaron cuando una creciente multitud repelió la agresión de los policías. A partir de ese día comenzó el movimiento que hoy conocemos como el Día del Orgullo, el cual da la bienvenida también a las personas aliadas de la comunidad.

En este artículo descubrirás, con términos sencillos y de forma concisa:

• ¿Qué es ser una persona aliada de la comunidad LGBTQ+?
• ¿Cómo ser una persona aliada?

¿Qué es ser una persona aliada de la comunidad LGBTQ+?

Ser un aliado de la comunidad LGBTQ+ significa apoyar activamente a las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, queer y demás identidades y orientaciones sexuales en su lucha por la igualdad y el respeto. Este compromiso va más allá de simplemente aceptar a las personas LGBTQ+; implica educarse, desafiar prejuicios y tomar acciones.

¿Cómo ser una persona aliada de la comunidad LGBTQ?

1. Educarnos

La educación es fundamental para ser un buen aliado. Es importante aprender sobre la terminología LGBTQ+, las diferentes orientaciones sexuales e identidades de género, y los desafíos que enfrenta la comunidad.

Estar bien informados implica saber, por ejemplo:

• Desde 1990, la Organización Mundial de la Salud eliminó la homosexualidad de su lista de enfermedades mentales.
• Los datos más recientes del INEGI muestran que en México la población mayor de 15 años que se autoidentifica LGBTQ+ es de más 5 millones de personas, es decir más de 5% de la población.
• Más del 50% de las juventudes LGBTQ+ en México consideró el suicidio en el último año. Esto conforme a los resultados de la “Encuesta 2024 sobre la Salud Mental de las Juventudes LGBTQ+ en México” realizada por “The Trevor Project México”

2. Utilizar un lenguaje inclusivo

El respeto comienza por nuestras palabras, por ello es muy importante utilizar un lenguaje que no hace distinción entre lo femenino y lo masculino, y que incluye a las personas no binarias.

Esto se logra a través del uso de un lenguaje inclusivo o del lenguaje neutro. Por ejemplo, en vez de decir “Bienvenidos y bienvenidas” puedes decir “Les damos la bienvenida”.

Presentarnos con nuestros pronombres, preguntar y respetar los pronombres y la forma en que cada individuo desea ser llamado, también es una forma de demostrar nuestro apoyo a la comunidad a través de nuestras palabras.

3. Confrontar Injusticias

Ser un aliado implica no quedarse callado ante comentarios o acciones discriminatorias. Es fundamental actuar cuando se presencia un acto de discriminación, ya sea en forma de comentarios ofensivos o bromas que refuercen estereotipos negativos.

La violencia verbal es igual de dañina que la física y debe ser confrontada con firmeza en todo ambiente; ya sea laboral, familiar o de amistades.

4. Apoyar a organizaciones y eventos LGBTQ+

Participar activamente en movimientos y organizaciones que apoyan los derechos LGBTQ+ es una forma poderosa de mostrar solidaridad.

Esto puede incluir asistir a eventos del orgullo, donar a organizaciones LGBTQ+, y abogar por políticas inclusivas. Los eventos y marchas del orgullo son momentos clave para mostrar nuestro apoyo y celebrar la diversidad.

5. Aprovechar nuestros privilegios

Las personas que tenemos privilegios o ventajas en espacios de liderazgo, toma de decisiones o de difusión, podemos aprovechar estas ventajas para:

• Dar oportunidades laborales o de exposición a personas de la comunidad
• Beneficiar a personas u organizaciones que apoyan la diversidad sexual y de género
• Emitir mensajes a favor del respecto de las personas LGBTQ+
• Invitar a otras personas a informarse y convertirse en aliados, ya sea en sus espacios de trabajo, familias o comunidad

Ser un aliado efectivo requiere educación continua, empatía y acción. No se trata solo de tolerar, sino de apoyar activamente y desafiar las injusticias.

Estas estrategias se basan en nuestra experiencia colaborando con diversas organizaciones y comunidades para fomentar un entorno más inclusivo y respetuoso para todas las personas.