La diversidad, equidad e inclusión (DEI) no deben limitarse a ser principios inspiradores; requieren de un marco formal que guíe las acciones diarias. Una Política de DEI bien estructurada no solo refleja el compromiso institucional, sino que también establece las bases para una implementación coherente y efectiva.

¿Qué es una Política de DEI?

La Política de DEI es un documento oficial que describe los compromisos, principios y prácticas de una organización hacia la diversidad, equidad e inclusión. Este documento es una herramienta clave para garantizar que estos valores se integren en todos los niveles de la organización y en su relación con los diferentes grupos de interés.

Mejores prácticas para el diseño de una Política de DEI

Para garantizar que la política sea efectiva y representativa:

• Involucra a todos los grupos de relación o stakeholders durante su elaboración para asegurar que las perspectivas clave sean incluidas.
• Redacta en congruencia con los principios de DEI, utilizando un lenguaje inclusivo, abarcando todas las dimensiones de la diversidad y asegurándote de que sea entendible para cualquier persona.
• Difunde y haz accesible la política para todo el equipo, clientes, proveedores y otros públicos relevantes.

Estructura de una Política de DEI

Para una implementación clara, la Política de DEI puede estructurarse en estas secciones:

1. Introducción:
   Explica cómo la DEI está integrada en la misión, valores y estrategia organizacional.
2. Objeto:
   Detalla el propósito de la política de manera breve y concreta.
3. Definiciones:
   Incluye conceptos clave como diversidad, equidad e inclusión, definidos en el contexto de la organización.
4. Documentación relacionada:
   Menciona los códigos, políticas y normas internas que se relacionan con la política de DEI, como el Código de Ética o la Política de Derechos Humanos.
5. Alcance:
   Indica a quiénes aplica esta política y su transversalidad, es decir, cómo se extiende hacia dentro de la empresa y hacia grupos externos como clientes y proveedores.
6. Lineamientos generales:
   Enlista los compromisos y pautas generales hacia los diferentes grupos de relación.
7. Responsabilidades:
   Describe los comportamientos esperados de las personas de la organización, desde el órgano de gobierno hasta cada persona empleada.
8. Monitoreo y evaluación:
   Establece cómo se garantizará el cumplimiento de la política a través de rendición de cuentas.
9. Mecanismos de reporte y corrección:
   Detalla cómo reportar incidentes y las sanciones por incumplimiento.
10. Revisión y actualización:
    Especifica qué departamento será responsable de la política y con qué frecuencia se revisará y actualizará.
11. Relación de revisión:
    Incluye una tabla que documente las versiones actualizadas, fechas, responsables de los cambios y aprobaciones.

Incluir una carta firmada por el liderazgo de la empresa presentando la política puede reforzar el compromiso institucional. Además, solicitar la firma del personal como aceptación del compromiso personal hacia la política es una buena práctica que fomenta la adherencia.

Ponlo en práctica: Desarrolla o actualiza la Política de DEI

1. Usa los puntos clave como checklist para crear o revisar tu Política de DEI.
2. Involucra a stakeholders mediante encuestas, focus groups u otras metodologías para garantizar su comprensión y alineación.

Este enfoque asegura una política inclusiva y adaptada a las necesidades de la organización.

En nuestra experiencia apoyando a diversas organizaciones a crear y actualizar su Política de DEI, hemos visto cómo una política bien diseñada y difundida puede marcar la diferencia en la forma en que las organizaciones operan y se relacionan con su entorno.

Una norma sólida es la que trasciende la retórica para transformar vidas con orden, equidad e inclusión.