La Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) son conceptos que cada vez más organizaciones están adoptando, pero ¿realmente sabemos qué significan y cómo impactan en el entorno laboral? Entender estos términos es esencial para construir equipos más fuertes, innovadores y comprometidos. A través de esta analogía sencilla, vamos a explorar de manera clara y práctica qué implica cada concepto.

Diversidad: Todos somos como árboles únicos

Imagina un bosque. ¿Todos los árboles son iguales? No. Algunos son altos, otros más pequeños, con hojas distintas. Así somos los seres humanos: únicos y diferentes. Tenemos características visibles y otras que no se ven a simple vista.

Para entender esta diversidad, el médico George Engel propuso el modelo bio-psico-social, que nos ayuda a comprender que somos una mezcla de:

• Biológico: Nuestro cuerpo y genes.
• Psicológico: Pensamientos, emociones y recuerdos.
• Social: Nuestro entorno, roles y experiencias.
• Espiritual: Valores, creencias y filosofía de vida.

¿Cómo puedes aplicar esto en tu empresa? Reflexiona: ¿Qué tanto consideras a las personas como un todo y no solo por lo que ves?

Equidad: Dar a cada quien lo que necesita

Equidad no es lo mismo que igualdad. Imagina una competencia de bicicletas. Si todos reciben la misma bici, quienes tienen diferentes capacidades o estaturas estarán en desventaja. Equidad significa proporcionar la bicicleta adecuada para cada persona. Es decir, ofrecer herramientas y condiciones específicas según las necesidades de cada quien.

En tu organización, pregúntate: ¿Estás brindando lo que cada colaborador necesita para alcanzar su potencial?

Inclusión: Crear un cóctel de frutas

La inclusión no se trata sólo de integrar personas, sino de hacer que todas se sientan parte y aporten su valor. ¿Recuerdas la analogía del bosque? Ahora piensa en un cóctel de frutas. Cada fruta es distinta pero juntas forman algo delicioso. Así funciona la inclusión: Cada colaborador contribuye con sus talentos y experiencias.

Reflexiona: ¿Tus colaboradores sienten que pueden ser ellos mismos y que sus ideas importan?

Diversidad no garantiza equidad ni inclusión

Un equipo puede ser diverso, pero si las personas no reciben lo que necesitan o no se sienten valoradas, la equidad e inclusión brillan por su ausencia. Por ejemplo, si un equipo está compuesto sólo por hombres mayores de 50 años, no hay diversidad. Si se integran mujeres y personas con discapacidad, hay más diversidad, pero ¿se les brindan las mismas oportunidades y condiciones para participar? Incluir no es suficiente, hay que asegurar equidad.

Cómo implementar DEI en tu organización

1. Define Diversidad, Equidad e Inclusión para tu empresa. Usa un lenguaje claro, involucra a diferentes áreas y alinea los conceptos con tu misión y valores.
2. Formaliza una política DEI. Légala a un documento oficial y comunícala de forma constante.
3. Aplica DEI de forma práctica. Asegúrate de que cada colaborador reciba lo que necesita para participar y crecer.

En nuestra experiencia trabajando con empresas, hemos visto que adoptar una cultura de Diversidad, Equidad e Inclusión transforma la dinámica interna y genera mejores resultados. Cuando las organizaciones abrazan estas diferencias, no sólo crean mejores lugares de trabajo, sino que contribuyen a construir una sociedad donde todas las personas tengan la oportunidad de brillar.